Conmemorando el 22 de Marzo Día Internacional del Agua.
Por: Laura María Miranda Cortes
Ecóloga y Directora de la Fundación CUNAGUARO
Si buscamos la definición del término “desarrollo”
encontramos que posee varias acepciones en donde principalmente se define como
un proceso de evolución que siempre tiene una connotación positiva ya que
implica un crecimiento, etapa o estadio de carácter superior. Si este término
lo integramos con la hoy muy sonada palabra “prosperidad” que contempla ese
bienestar y éxito, podríamos afirmar que según como lo hacen ver nuestros
gobernantes y los medios de comunicación, estamos en un proceso de desarrollo
prospero que debe estar beneficiando a todos los colombianos. Pero realmente ¿a
qué tipo de desarrollo nos enfrentamos?.
La mayoría nos enorgullecemos de nuestras riquezas
naturales y culturales; somos a nivel mundial reconocidos como un país
megadiverso, poseemos el
mayor número de especies de aves y anfibios en el mundo, ocupamos el segundo
lugar en plantas, tercero en reptiles y así sucesivamente dentro de los más
altos escalafones en línea o superior a países como Brasil con un
territorio mucho menor a éste; asimismo, poseemos una gran diversidad cultural
que varía de región en región. Pero, ¿que tanto de ella realmente valoramos y
que tanto de ella estamos dispuestos a conservar en nombre del “desarrollo”?.
Considero que ese dichoso desarrollo y esa prosperidad se
esta convirtiendo en una excusa que esta cada vez perdiendo mayor
reconocimiento de nuestra riqueza natural y humana. Nuestro país se ha convertido en una
fuente energética y mineral que tiene el propósito de satisfacer los estilos de
vida de países “desarrollados”. Sin embargo ¿a costa de qué?.
Resaltó lo expuesto por Beatriz H. T Ramirez, directora
de Biodiverisidad de la Asociación de Becarios de Casanare (ABC) en la
cual menciona “A
mí me gusta definir desarrollo como un mejoramiento continuo de la calidad de
vida de la personas. Claramente, el desarrollo depende directamente del
mantenimiento de un ambiente sano, ya que no concibo una mejor calidad de vida
en un entorno con mala calidad de agua, aire, suelos, etc. Sin embargo, esto
parece que nuestro Gobierno no lo tiene tan claro. Mi argumento está sustentado
en los indicadores que se utilizan para medir desarrollo, ya que en la mayoría
de casos están ligados a nuestro poder adquisitivo o en otras palabras, a
cuantos billeticos tenemos para comprar más cosas. En segundo lugar, el
Gobierno, mal mencionado a ratos como el Estado, es a quien los colombianos
hemos designado para que organice y administre a nuestro país a través de
normas. Es este quien tiene, entre otros, la tarea de garantizar que la
normatividad ambiental de Colombia se cumpla, y promover el desarrollo del país,
me permito recordar que este abarca a todos los servidores públicos, incluyendo
a quienes designamos cada cuatro años mediante votaciones, como los
administradores de nuestro presupuesto. ¿Será que ellos también entienden
desarrollo exclusivamente como sinónimo de más dinero? ya veremos sus
propuestas ambientales en sus planes de desarrollo... “.
Integrando estas reflexiones, aterrizo todo lo anterior a
una situación puntual en nuestro departamento de Casanare, en donde en nombre
del desarrollo se desprende en la actualidad un gran revuelo de carácter
socioambiental que ha involucrado a muchos sectores de la sociedad civil en
torno a ello, este es el caso de la intervención petrolera que la compañía
CEPCOLSA ejerce en el área de influencia directa de la Laguna del Tinije,
importante y representativo humedal del departamento, reconocido por una gran
belleza paisajística y una alta biodiversidad, la cual fue declarada como un
Distrito de Manejo Integrado (DMI) con un total de 13.768.015 Ha., mediante
acuerdo N° 1100-02-2-08-012 del 5 de Diciembre de 2005; igualmente fue
reconocida como reserva natural por medio de acuerdo municipal N°. 005 de
1993 por la Alcaldía de Aguazul y Acuerdo N°018 del 25 de Noviembre de
1993 por la alcaldía de Maní, ya que es compartida por estos dos
municipios. Mucho se ha especulado por los medios de comunicación sobre
este tema, pero con el propósito de exponer los diferentes puntos de vista de
las partes involucradas, hemos querido reunir la información pertinente para
que la opinión publica conozca la situación y juzgue, rechace o apruebe este
tipo de acciones según considere.
Se plantea por parte de la comunidad aledaña a la laguna
que la locación construida para el Pozo Chirinola 1 se encuentra muy cerca (187
metros) de la cota máxima de inundación del cuerpo de agua, esta medida
esta basada en el bosque de galería circundante más cercano a la locación y el
cual es de carácter inundable. Por otro lado la compañía contempla
una distancia superior a 300 metros con respecto al cuerpo hídrico, cumpliendo de esta forma lo establecido por la normatividad actual.
CORPORINOQUIA, la máxima autoridad ambiental local a partir
de su Coordinadora del sector Hidrocarburos Diana Nieto, expone que atendiendo
los acontecimientos generados en los últimos días como consecuencia del
proyecto que se viene desarrollando en el área de influencia directa del
Distrito de Manejo Integrado la Laguna del Tinije, desde el 8 de marzo de 2012
se ha notificado a la Compañía CEPCOLSA para que suspenda las actividades del
Pozo Chirinola 1 dentro del área del Bloque de Perforación Exploratoria Llanos
26, licenciado directamente por el entonces Ministerio de Ambiente, Vivienda y
Desarrollo Territorial (MAVDT), única autoridad competente para este tipo de
permisos.
“(…) articulo Tercero: El proceso de ordenamiento del Distrito
de Manejo Integrado deberá mantener las siguientes categorías: 2. Zona de
producción: (10.112,1331 Has.): Área susceptible para
la producción, destinada a la generación y obtención de bienes y servicios
a través del aprovechamiento racional de los recursos naturales, en un contexto
de desarrollo sostenible , en este caso la zona esta destinada a
actividades de ganadería y agricultura representada en cultivos comerciales
como arroz, y cultivos de pancoger.
Por lo anterior Corporinoquia resalta que dentro de la
Licencia otorgada a CEPCOLSA, existen unas áreas consideradas como de
exclusión o no intervención dentro de la cual se enmarca expresamente la Laguna
del Tinije por ser DMI, por lo que se debe tener en cuenta la zonificación
previamente establecida en donde no se incluyen las actividades de índole
industrial.
Igualmente CORPORINOQUIA afirma que el MAVDT, hoy a cargo
la Autoridad
Nacional de Licencias Ambientales,
no ha realizado pronunciamiento alguno sobre el Plan de Manejo Ambiental (PMA)
que la compañía CEPCOLSA presentó, en la cual se expone la ubicación puntual de
los Pozos; no obstante, cabe resaltar que los PMA según la normatividad
actual no son sujeto de evaluación previa, basta con haber autorizado el
Estudio de Impacto Ambiental (EIA) correspondiente al bloque de interés; sobre
esto se evidencia un gran vacío en la legislación ya que no se esta previendo
como la ubicación puntual de una estructura de estas influye con el medio
circundante; por esta razón CEPCOLSA, amparados en este aspecto ubicaron según
sus necesidades técnicas el pozo Chirinola 1, pero sin tener en cuenta lo
expuesto en el DMI y los acuerdos municipales instaurados que lo clasifican
como una área destinada a la conservación de los recursos naturales con ciertas
especificaciones de manejo.
En relación a las acciones y pronunciamientos dados por la
Compañía Petrolera: "CEPCOLSA ha decidido suspender la operación y evacuar a los
trabajadores que se encuentran en el Pozo Chirinola 1, debido a que la situación
de hecho iniciada desde el sábado pasado contra su operación ha generado : una
emergencia sanitaria, que amenaza la salud e integridad de más de 100
trabajadores, varios de ellos miembros de la comunidad. Debido a que personas
extrañas a las veredas contiguas al pozo impiden el acceso de agua potable
y alimentos y estos recursos se han agotado; esto se agrava debido a que los
manifestantes han impedido la salida de basuras y aguas residuales.
La operación del pozo Chirinola se realiza bajo estrictos estándares ambientales
y acatando de manera diligente las obligaciones establecidas en su licencia
ambiental. CEPCOLSA ha solicitado a la Autoridad Nacional de Licencias
Ambientales que confirme este acatamiento y está a la espera de su respuesta.”
“En el marco de su responsabilidad social, la
empresa ha ofrecido y está dispuesta a contribuir con las instituciones y las
comunidades a la recuperación de la laguna El Tinije, la cual ha sido históricamente
afectada por la acción irresponsable de terceros. Los daños a ese ecosistema
son previos y no tienen relación con la operación de la empresa, como está
debidamente documentado. CEPCOLSA tiene una política que privilegia el diálogo
y la búsqueda consensuada de soluciones a las preocupaciones que puedan surgir
en torno a sus actividades. Esa actitud no ha sido correspondida por parte de
quienes lideran y estimulan el bloqueo. La empresa considera que no es viable
ni aceptable sostener una dinámica de diálogo mientras al mismo tiempo se ponen
en riesgo los derechos fundamentales de los trabajadores y de la misma
comunidad”.
A diferencia de los expuesto por CEPCOLSA, la
comunidad civil de la zona expone engaños en la socialización del proyecto,
donde nunca se presentó la ubicación puntual del pozo y además de esto no se
han tenido en cuenta su planteamientos con respecto a la concepción de la
laguna y las posibles afectaciones que está puede tener, por esta razón
mantienen su posición, la cual afirman se ha visto amenazada por funcionarios
de la compañía.
Entonces… frente a esta situación ¿qué se puede
esperar para la resolución de este conflicto?. Una forma para resolverlo es que
CEPCOLSA atendiendo la preocupación de la comunidad y las autoridades
ambientales, suspenda y elimine actividades sobre este ecosistema, no obstante
se debe tener en cuenta que estamos hablando de un proyecto de interés nacional
ya licenciado, en el cual están involucrados millones de dólares que una compañía
no esta dispuesta a perder tan fácilmente, además de ello amparada en vacíos
legales que le permiten realizar este tipo de actividades.
Por otro lado, la pregunta es ¿por qué esperamos
hasta este momento para emprender acciones en contra de esta perforación?,
actualmente se encuentra la fase de taladro, pero antes de ello hubo construcción
de la locación, adecuación de la vía, movilización de maquinaria y personal a
la zona, momento oportuno para haber desarrollado este tipo de acciones en la
cual la compañía no se viera comprometida en gran medida de forma económica e
implicara con ello menores compromisos dentro de las negociaciones.
Otra salida posible es continuar con las protestas,
pero puede que estas después de un pronunciamiento negativo para la comunidad
por parte de la oficina de licencias, lleve a una situación de violencia que
atente contra la integridad de la comunidad o la misma compañía, lo cual
acarrearía un problema de carácter social que también traería como consecuencia
un inconformismo generalizado en el país y un rechazo a la actividad, que no es
conveniente ni para la compañía involucrada, otras compañías petroleras y el
mismo gobierno.
Para realmente valorar lo que es actualmente la
laguna del Tinije tenemos que reconocer su importancia como uno de los
humedales más representativos del departamento de Casanare ya legalmente reconocido,
fuente representativa de agua y de una gran belleza paisajística con alto
potencial ecoturístico, además de ello albergue de una alta diversidad de
especies, algunas de estas que actualmente se encuentran en peligro de extinción,
así como lo reporta ABC, con especies como el bagre del Meta y e bagre del
Orinoco (Pseudoplatystoma metaense y P. orinocoense),
las tortugas morrocoy (Chelonoidis carbonaria) y terecay (Podocnemis
unifilis), el Oso palmero (Myrmecophaga tridactyla) y el pato
carretero (Neochen jubata).
No obstante, la comunidad civil debe conocer que no
solo los impactos petroleros pueden degradar este ecosistema, también existe
una alta producción arrocera y ganadera con pastos introducidos, actividades
agropecuarias que han atentado continuamente con la funcionalidad del
ecosistema y la calidad de agua y que no están siendo reconocidas por aquellos
que circundan y habitan los alrededores de la laguna ni por las autoridades
ambientales.
Por ahora queda esperar las decisiones definitivas frente a
esta actividad, CEPCOLSA se retire o no del área tiene que contemplar
estrategias puntuales de manejo frente a este tipo de ecosistemas, ¿cómo va
apoyar puntualmente la conservación de este humedal y de las especies en
peligro que en ella se encuentran?, ¿como controlará y evitará impactos?,
porque no hay cabida a mitigarlos; y finalmente ¿como integrará a la comunidad
frente a las decisiones que al respecto se tomen?.
Por último solo me queda decir que solidifiquemos
argumentos y con ellos mantengamos posiciones de acuerdo a nuestras
convicciones, arraigo por nuestra tierra y pensando en el futuro generacional
de nuestra región y aunque la
industria petrolera es una importante fuente de desarrollo económico para la
nación, no puede ser una escusa para afectar ecosistemas representativos y
sobrepasar acuerdos ya establecidos a nivel regional que reconocen la
importancia de un área. Por otro lado todos debemos estar de acuerdo que lo
ambiental no puede seguir siendo el caballito de batalla frente a la industria
y que con ello solo se exija dinero y elementos absurdos que no compensan
realmente la afectación de una zona, por esto debemos empezar a valorar ecológica
y funcionalmente nuestros recursos naturales y preguntarnos si estos valen más
que el codiciado petróleo.
Finalmente, me alegra ver al pueblo unido frente a este
proceso, un ejemplo de ello fue una marcha ciclística hacia la laguna realizada
el pasado 18 de marzo, convocada por CICLOAVENTURA Yopal, en la cual se puede
evidenciar el apoyo que diferentes sectores en este caso deportistas están
realizando, y así sucesivamente se podrían nombrar a diferentes participantes
del común que apoyan a la comunidad local. En general los colombianos nos
estamos cansando de tantos atropellos sociales y ambientales en nombre del
desarrollo; todo esto ha servido para fortalecernos como región y empezar a
estar más conscientes y argumentados acerca de lo que afecta el departamento, y
con ello resalto que existen muchas más afectaciones industriales y agrícolas
sobre ecosistemas representativos al igual que el Tinije. De la fortaleza y unión
de los Casanareños despenderá que las industrias petrolera, minera y
agropecuaria no pasen por encima de nuestros recursos naturales y la cultura
llanera, porque el día de mañana un vaso de petróleo no nos calmará la sed.
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